Malala es de los nuestros
En épocas pasadas, el Valle del Swat, situado en las regiones montañosas del norte de Pakistán, entre Cachemira y el Paso del Khyber, era un remanso de paz bajo el gobierno de Miangul Abdul Haq Jahanzeb, el «wali» (monarca absoluto) del estado principesco de Swat, quien modernizó el país y, entre otras cosas, construyó escuelas para sus súbditos, tanto niñas como varones, y recorría en automóvil las regiones apartadas de sus dominios donde nunca se había visto esa clase de vehículo.
«Un lugar prístino, hermosísimo, en el que las montañas llegaban hasta las nubes»: así describe Zebu Jilani la…