La realidad del tráfico humano
A los 17 años, Jennifer se veía obligada a dormir en las calles de Atlanta.
Sujeta a maltratos y abuso sexual por parte de sus hermanos y expulsada de su hogar, Jennifer, cuyo verdadero nombre no se divulga para proteger su privacidad, en poco tiempo cayó presa del tráfico sexual durante dos años. Fue entonces que descubrió el albergue de Covenant House.
«Los estudios indican que los jóvenes que se quedan en la calle, en las primeras 48 horas terminan víctimas de alguna forma de explotación, generalmente tráfico sexual», afirma Allison Ashe, directora ejecutiva de Covenant House Georgia, uno…